La siembra avanzó un 27%, siendo este ritmo inferior a la campaña precedente. Según la nueva estimación de superficie de trigo para la campaña 2024/25, se destinarían 1,1 millón de hectáreas al cultivo, área 15 puntos porcentuales por encima a la sembrada en la campaña anterior.

En mayo, tras la exitosa recarga de perfiles con lluvias del mes pasado, el pronóstico climático y la humedad inicial del perfil son los principales factores que influyen en la decisión de siembra. Por su parte, el precio y rentabilidad esperada del trigo inciden en menor medida. Otro factor mencionado con frecuencia es la rotación de cultivos. Frente al contexto sanitario actual con relación al complejo de achaparramiento de maíz, se plantea como mejor opción una secuencia trigo-soja.

En la campaña 2024/25 se sembrarían alrededor de 26 mil hectáreas de garbanzo en la provincia, lo que representa un aumento del 58 % respecto a la campaña anterior. Hacia fines de mayo, más de la mitad de los lotes se encontraban implantados.

El precio y la rentabilidad esperada del cultivo junto con la humedad de los perfiles acumulada por las lluvias de otoño, son los principales motivos que influyen en la intención de siembra.