MAÍZ. El cereal sufrió estrés térmico e hídrico alto, situación agravada en los maíces tempranos ya que atravesaban su período crítico para la definición del rendimiento.

SOJA. Las altas temperaturas y el granizo afectaron notablemente al cultivo, situación que se refleja en el estado general de la oleaginosa, donde el 25 % de la superficie se encontraba con un estado entre regular y malo.

SORGO. El 70 % de los lotes se encontraban con los niveles máximos de área foliar e intercepción de luz. El cereal también padeció las condiciones ambientales durante enero, disminuyendo el porcentaje de lotes en estado muy bueno respecto al mes anterior.

MANÍ. El cultivo se encontraba en condiciones predominantemente buenas y muy buenas, con estrés térmico e hídrico moderado.

GIRASOL. Con un 64 % de los lotes en estado bueno y muy bueno, el 92 % de la superficie culminaba la etapa de floración, quedando definido el número de granos fijados.