Con la cosecha de soja casi finalizada, se estima una producción de 524.600 toneladas, lo que representa un 61 % menos respecto del promedio histórico (2018/19-2021/22) para la provincia.

La escasez de lluvias durante la estación húmeda y la ocurrencia de heladas tempranas, sumado a la presencia de plagas con alta presión, afectaron negativamente al rendimiento del cultivo, que se estimó en 16,1 qq/ha, 50 % inferior a la campaña pasada.

Además y según el reporte del 95 % de los colaboradores, se registró grano verde al momento de la cosecha, con porcentajes variables según el lote.

Continúa el avance de la cosecha de maíz, alcanzando hasta el momento un 23 % de los lotes. Se estima un rendimiento  promedio de 46,7 qq/ha, lo que representa una variación negativa de 27 % respecto al promedio histórico para el cultivo en la provincia. Esta disminución del rendimiento refleja los daños por falta de agua, heladas y pedrada.

Los eventos climáticos adversos mencionados causaron pérdidas en la superficie que, sumada al área destinada a forraje, se traduce en una diferencia del 29 % entre las hectáreas sembradas y las cosechables. 

Con el 81 % de los lotes de maní cosechados se estima un rendimiento de 23,0 qq/ha en caja limpio y seco, lo que representa una variación interanual negativa del 28 %. Esta merma en el rinde refleja la afectación por sequía y heladas que sufrió el cultivo junto con la presencia de arañuelas (Tetranychus urticae) y trips (Frankliniella schultzei) con alta presión.

La producción estimada para la campaña es de 19.000 toneladas de grano limpio y seco, siendo un 37 % inferior a la producida en la campaña 2021/22.

Con la cosecha de sorgo finalizada, se estimó un rendimiento promedio de 20,0 qq/ha lo que representa una variación negativa del 37 % respecto del promedio de los últimos dos años.

Del total de hectáreas sembradas, 3.000 ha habrían sido cosechables y el 92 % restante corresponde a superficie destinada a forraje o perdida. La producción estimada es de 6.000 toneladas, lo que representa una variación negativa del 86 % respecto al promedio histórico (2020/21-2021/22).

Las precipitaciones acumuladas durante el último trimestre fueron inferiores a las del promedio histórico (2015-2022). Mientras que el nivel histórico de precipitaciones ronda los 200 mm para el trimestre considerado, durante este año sólo tres departamentos superaron los 150 mm.